Claustro Poético

Boletín virtual de poesía, edición trimestral. Nº 70. Otono-2022

Asociación Cultural Claustro Poético

 

  Director: Juan Carlos García-Ojeda Lombardo

  Coordinador: Juan Antonio López Cordero

D.L. J-309-2005

ISSN 1699-6151

CONSEJO DE REDACCIÓN

Poemas

Haiku dek incendio forestal

Solo a ratos

Cuerpo celeste

Ese amigo sin nombre

El candil

Carolina (video-poema)

Embrujo (video-poema)

Esperando estaba a que la fresca lluvia rociara poesía (video-poema)

Fijar (video-poema)

Hoja de otoño

Cruce de ensueños

Jaén desolado

Cristo Jesús, la luz sobre el camino

Dios quiso hacerse vida en nosotros

Que nadie pueda quedarse quieto

Requerimientos y obligaciones

 


Colaboraciones

La pastora


Noticias

Certámenes de poesía octubre-diciembre-2022

 


Colaboran en este número

 


Nos anteriores

 

Año Primav. Verano Otoño Invier.
2005 0 1 2 3
2006 4 5 6 7
2007 8 9 10 11
2008 12 13 14 15
2009 16 17 18 19
2010 20 21 22 23
2011 24 25 26 27
2012 28 29 30 31
2013 32 33 34 35
2014 36 37 38 39
2015 40 41 42 43
2016 44 45 46 47
2017 48 49 50 51
2018 52 53 54 55
2019 56 57 58 59
2020 60 61 62 63
2021 64 65 66 67
2022 68 69    

 

 

Jaén desolado*


  

Jaén, la bienamada de siglos de sosiego;

la de patricios lares y la de hogar labriego,

do ubérrimos maduran los frutos en agraz,

do yacen las espadas junto a los pergaminos

y tienen las estancias olores de molinos

y hay bajo los escudos un símbolo de paz.

 

                                              Bernardo López

 

Has hecho de mí

una avecilla que transita tu piel dolida,

que revolotea tus barbechos

con amor de madre.

 

Y te siento, como se siente la tierra

después de la lluvia,

tan amada, tan adentro

cual poesía de Petrarca.

 

Pero tus verdes aceitunas

son lágrimas

que se desgarran contra tu heredad,

en el clamor de tu tristeza,

como una promesa cenicienta

o como canto de las minas desmanteladas

que late cada mañana en los ecos extinguidos.

 

Un día más,

amanezco en tu regazo,

y escalo con mis ojos

tu inmensidad de olivos

tan semejantes en su quietud

a la más bella partitura.

 

Y vuelves a ser memoria del olvido,

Jaén, mientras tu oro líquido

amamanta con tu epílogo

al resto del mundo.

 

                       *Rocío Biedma

 

Envíanos tus poemas